Читать книгу Transpersonalismo y decolonialidad. Espiritualidad, chamanismo y modernidad онлайн

22 страница из 95

Por su parte, el llamado “giro decolonial” ha trabajado sobre decolonizar el feminismo occidental blanco de clase media y ha estudiado la decolonización de la justicia de género, particularmente el sentido de persona extendido a la comunidad, el entorno y el medio ambiente, el derecho a reparaciones comunitarias por delitos personalísimos como violaciones, el derecho al territorio y entorno sanos como parte de los derechos de género, etc… pero poco y nada se ha explorado acerca de la raíz última de estas expresiones cosmovisionales y culturales en los estados expandidos de la conciencia. Los filósofos y cientistas sociales adscriptos a la mencionada corriente han analizado la bioética principialista, las metodologías del archivo y la patrimonialización, las lógicas de la escritura hegemonizante, el reto de decolonizar la universidad, la geopolítica internacional, la ciudadanía, y en general, cómo decolonizar la epistemología; sin embargo, no se ha prestado atención suficiente, o directamente ninguna, a las formas epistémicas que incluyen otros niveles y grados de ampliación de la conciencia. Se ha intentado rescatar, dentro del amplio espectro de las performances, la canción, el ritual, las prácticas curativas o el “éxtasis religioso” como una forma de lograr mayor legitimidad y “justicia cognitiva” (según el concepto de Boaventura de Sousa Santos), pero de un modo superficial, sin profundizar en el conocimiento mediante EAC, y sin advertir que dichos estados como formas epistémicas válidas no solo son formas “no modernas” (que no “premodernas” por supuesto) sino, además, aplicadas al actual mundo que se debate entre la modernidad aún vigente en el sentido común, y la posmodernidad vacilante, como una extraordinaria herramienta de decolonización mental.

Правообладателям