Читать книгу Cuarenta años y un día. Antes y después del 20-N онлайн
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Y es por aquí, si bien se ve, por donde aparecen por primera vez en este relato demonizador las masas, esa movilización popular cuya ausencia algunos celebran como condición para el triunfo del proceso democratizador,ssss1 y la que otros directamente minusvaloran, como es obvio cuando se trata de reafirmar el papel de las élites reformistas.ssss1 También se puede dar un cierto reconocimiento de las dinámicas populares, aunque presentadas en clave subordinada. Y no faltan, en fin –todo lo contrario–, quienes terminan por subsumir al conjunto de los sectores populares en el papel de sujeto paciente de todas las manipulaciones, distorsiones o claudicaciones.ssss1 Por supuesto, estas distinciones son más complejas de lo aquí expuesto, pero en sus transversalidades y permutaciones, en los distintos autores y para los diversos tiempos y circunstancias, podría decirse que en el sustrato mítico de la transición sacralizada y en el sustrato mítico de la transición demonizada, la sociedad civil es, por activa o por pasiva, la gran ausente.ssss1 En lo que sigue, aunque sin grandes pretensiones de originalidad, intentaremos poner de manifiesto algunas cuestiones esenciales para un enfoque alternativo a los que hemos venido considerando.ssss1